El Colegio Santiago de Víñac celebra un año más de servicio a esta comunidad el 31 de octubre. ¿Cuántas generaciones han pasado por sus aulas? En un principio, los alumnos no solo fueron de Víñac, sino iban, también, de Apurí, de Madeán, de Florida, de Tayamarca y otros pueblos. Incluso dicen que había estudiantes de Huangáscar, de Chincha o de Huancavelica.
A veces se dice que la generación pasada fue mejor; sin embargo, esa generación pasada educa a sus hijos en esta institución y el pueblo de Víñac sigue su marasmo, su apatía en los distintos sectores. A la distancia se puede decir: "Oh, qué mal". Los profesores no hacen bien su trabajo. Y de pronto te encuentras con otra frase: "La educación, los valores nacen de casa, de papá y mamá". Entonces, poco hay para culpar a los ocasionales educadores.
Las santiaguinas ganando el desfile en Madeán el 2013. |
La institución ha mudado aunque sea de estructura y de uniforme. Hoy luce un pabellos de material noble y ya no están las aulas de tierra. Hoy visten de celeste y ya no está el plomo ni el más antiguo color beis con quepí. Hoy estudian hijos de santiaguinos y ya no están los que cada mañana llegaban corriendo, cual chasquis, por todos los lados a este distrito.
La formación empezaba a las 7:55 de la mañana en ese patio que hasto hoy luce el mismo cemento. Las sonoras palabras del maestro abrían la formación. Luego los ecos acompañaban el himno patrio. El viva el Perú partía desde las faldas de Wiñaccancha. El golpe de atención tenía que ser único y estruendoso. Luego venían las presentaciones artísticas y a las aulas, señor. Allí entre el cariñoso apodo a uno u otro se atendía al profesor. Llegaba el recreo y a correr, a tomar agua de caño (tan fresco como las investigaciones científicas). Y otra vez en las aulas con la historia y la gramática. Entonces llegaba la hora del almuerzo y cada quien a comer su cancha con queso o su pan de Madeán. A veces, había el refectorio que los mismo alumnos preparaban, quemadito o no, era delicioso. Después de una siesta a las 13:00 otra vez en formación para ingresar a las aulas hasta las 18:00 horas. ¡Qué labor de colegial!.