Mi padre era serio, adulón. Me colocaba las frutas que traía desde Lunahuaná o Pacarán a una altura accesible cuando estaba contento y cuando se molestaba, los racimos de uvas la colocaba a una altura inalcanzable. A veces, me llevaba a escondidas sus papas (Esas papas de Tambopata son deliciosas, arenosas) y creía no saber; pero, sé que se daba cuenta. Era su forma de quererme. Gracias, abuelo Julián.
Mi padre era serio y exigente. Me dejaba jugar pero, también, me exigía con rigor. Cada que salía a su trabajo, me encargaba una lectura y yo tenía que leer. Apenas volvía a casa, me buscaba por todas las canchas de fulbito y me evaluaba sobre el libro encargado. ¡Cuánta procupación te causé! Gracias, porque desde esa época me encaminaste al conocimiento. Gracias, porque sin ello cómo me ganaría los frejoles. Gracias, tío José.
Mi padre era alto y querendón. En cada vacaciones, la pasabamos juntos, me daba cariño. Y para que yo vaya al colegio, se preocupaba de que no me falte un solo instrumento escolar, desde un lápiz, un buzo, una zapatilla, un uniforme e incluso una vanidad. Gracias por ese esfuerzo impagable. Te acuerdas que me prometiste un reloj si yo obtenía el primer puesto: ¡te fallé! Pero en la vida, la hice linda. Gracias, tío Paulino.
Mi padre era responsable y locuaz. Cada día me daba el calor de su hogar, me enseñaba las responsabilidades del campo. A veces muy temprano caminábamos entre las cordilleras de Axo, Waxakuna, Mishtipawañusam y otras con un poco de agua mojábamos la siembra de Muchka, de kunkayoj. Gracias, tío Filomeno.
Mi padre era sencillo y amigable. Me enseñó a sobreponerse a los problemas, a ignorar el dolor. Gracias, tío Martín.
Mi padre era alegre y preocupado por su comunidad. Sus bromas sembraron en mí la alegría. Gracias, tío Viviano.
Hoy es día del padre. Un padre no es el que engendra, es el que cuida día a día, es el que va formando la personalidad, la ambición, el camino hacia el éxito. Es el que, aún cuando cree tener una obra concluida, sigue preocupado por su perfección. Mil gracias a ustedes: A mis primos Rubén, Germán, Jorge, Dennis y todos los papás:
¡Feliz día del Padre!
